La formación bruta de capital físico, es decir la inversión, es uno de los determinantes del crecimiento económico. En el caso de Ecuador, desde la dolarización la FBKF (Formación Bruta de Capital Fijo) ha venido en constante ascenso en relación al PIB, lo cual en gran parte explica el buen desarrollo de la economía ecuatoriana entre el 2001 y el 2012, periodo en el cual la economía creció a una tasa promedio del 4.51% (T-4).
Sin embargo es notorio que
desde el gobierno del presidente Rafael Correa (año 2007), la proporción entre
inversión pública y privada cambio radicalmente, en promedio la inversión
privada decayó en un 2.45% del PIB y la inversión pública aumento en un 5.58%,
lo que deja como resultado un saldo neto del 3.12% del PIB en el aumento de la
inversión.
Si bien la tasa global de
inversión fue mayor durante el gobierno de la Revolución Ciudadana, el
crecimiento económico fue menor 4.28% contra 4.74% del periodo 2001-2006, lo cual podría relacionarse con
una mayor productividad de la inversión privada sobre la pública; un mayor
intervencionismo del Estado que podría haber asfixiado a la economía, dado a
que la presión fiscal como porcentaje del PIB se ha incrementado notablemente; o
simplemente debido una coyuntura internacional más deteriorada, un crecimiento
del PIB mundial del orden del 2.86% en el periodo de gobiernos anteriores contra un 2.01% durante el periodo 2007-2012 (Ver Tabla 1).
Tabla 1. Crecimiento del PIB, Inversión privada y pública con respecto
al PIB
Ante estos resultados cabe preguntarse ¿Es la inversión privada más productiva que la inversión pública? ¿Es saludable para la economía el alto intervencionismo estatal? o acaso ¿El menor crecimiento durante el periodo 2007-2012 obedece a una coyuntura mundial más deteriorada?